Narges Mohammadi, la galardonada con el Premio Nobel de la Paz, actualmente detenida en Teherán, ha hecho un llamado urgente a sus compatriotas iraníes para protestar contra lo que ella describe como “una guerra a gran escala contra las mujeres”, tras el reciente endurecimiento de la represión por parte de las autoridades.
Mohammadi ha instado a las mujeres iraníes a compartir sus experiencias sobre los arrestos y los abusos sexuales perpetrados por las autoridades a través de su cuenta de Instagram.
En un contexto donde la atención internacional se centra en la creciente tensión en Oriente Medio, las autoridades de Teherán anunciaron este mes medidas para reforzar el control sobre el uso del velo, una prenda que las mujeres están obligadas a llevar desde la Revolución Islámica de 1979.
Reportes de activistas indican que varias mujeres han sido arrestadas y llevadas a comisarías por la policía de la moral, en respuesta a mensajes en redes sociales con la etiqueta “guerra contra las mujeres”.
“Les pido a los artistas, intelectuales, trabajadores, profesores y estudiantes, tanto dentro como fuera del país, que se unan a mí en protestar contra esta guerra contra las mujeres”, expresó Mohammadi en un mensaje transmitido el domingo.
La activista enfatizó en el poder de compartir experiencias, argumentando que esto expondría al gobierno misógino y lo llevaría a rendirse.
Mohammadi logró difundir este mensaje a través de una llamada telefónica desde la prisión de Evin, donde está detenida. Privada de usar su propia tarjeta telefónica durante cinco meses, utilizó la de otra detenida, Sepideh Gholian, quien también es considerada una prisionera política por organizaciones no gubernamentales.
Con 52 años, Mohammadi fue galardonada el año pasado con el Nobel de la Paz por su compromiso con los derechos humanos en Irán. Desde noviembre de 2021 se encuentra en prisión, habiendo sido condenada y encarcelada en múltiples ocasiones en los últimos 25 años por su lucha contra el velo obligatorio para las mujeres y la pena de muerte.
El lunes, Human Rights Watch denunció que las fuerzas de seguridad “violaron, torturaron y abusaron sexualmente de las detenidas” durante la represión de las multitudinarias protestas que sacudieron el país en 2022 y 2023.