El presidente francés, Emmanuel Macron, ha decidido declarar el estado de emergencia en el territorio francés de Nueva Caledonia después de que los disturbios relacionados con una reforma del censo electoral provocaran la muerte de cuatro personas desde el lunes y dejaron cientos de heridos.
Las protestas surgieron el lunes cuando la Asamblea Nacional, desde París, comenzó a debatir la reforma del censo electoral, la cual finalmente fue aprobada el miércoles poco después de medianoche. Actualmente, solo los votantes inscritos en 1998 y sus descendientes pueden participar en las elecciones provinciales de este territorio insular del océano Pacífico, que cuenta con 270 mil habitantes.
Los independentistas han expresado su preocupación de que la ampliación del censo electoral para permitir el voto de aquellos radicados más recientemente reduzca la influencia proporcional de los pobladores originarios canacos en las instituciones locales, las cuales han recibido amplias competencias transferidas por París.
Tras una primera noche de graves disturbios, con incendios, saqueos y disparos contra la policía, las autoridades del territorio impusieron un toque de queda, prohibieron las reuniones públicas y cerraron escuelas y el principal aeropuerto.
El Alto Comisionado —representante del Estado francés— Louis Le Franc, reconoció la magnitud de la situación, calificándola como “insurreccional” en el archipiélago, donde los enfrentamientos han dejado un saldo de “cientos” de personas heridas, incluyendo a un “centenar” de policías y gendarmes.
El gobierno francés propuso la reforma constitucional para incluir a las personas establecidas en Nueva Caledonia desde hace al menos diez años en el censo electoral. Sin embargo, los independentistas canacos temen que esta ampliación beneficie a las formaciones afines a París y reduzca su influencia.
A pesar de los esfuerzos por restaurar la calma, los disturbios continúan, reflejando la determinación de los jóvenes de no permitir que Francia los controle, según el líder del partido proindependencia, Daniel Gao. En este tenso contexto, el gobierno de Macron busca una solución política que garantice el orden y la estabilidad en la región.
