Un visitante peludo y poco convencional dejó a los linarenses con más preguntas que respuestas.
Lo que empezó como una noche tranquila terminó con un invitado reptiliano que nadie esperaba.
Estos marsupiales son aliados clave en el equilibrio ecológico urbano y rural.
Un primate con más drama que telenovela requirió todo un operativo para bajar de su improvisado escenario arbóreo.