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CIUDAD DE MÉXICO.- La promesa es entregar un crédito fácil, pero su objetivo es aprovecharse de la necesidad de los usuarios… y de su información.
Así es como operan los “montadeudas”, quienes ofrecen préstamos ilegítimos a través de aplicaciones móviles, advirtió la Ciberguía 3.0, elaborada por la Dirección General de Gestión de Servicios, Ciberseguridad y Desarrollo Tecnológico, área dependiente de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
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Su modo de operar resulta sencillo. En las tiendas virtuales colocan aplicaciones para otorgar supuestos préstamos accesibles.
El “gancho” que lanzan los ciberdelincuentes consiste en prometer no revisar el buró de crédito ni comprobar los ingresos del solicitante.
También ofrecen realizar depósitos en cuestión de horas y la facilidad de resolver todo el trámite a través del celular.
Aunque aparentan muchos beneficios, señaló la autoridad, es altamente riesgoso contratar estos servicios.
Durante la instalación de la app de préstamos se solicitan diversos permisos para acceder, por ejemplo, a la galería de imágenes y a los contactos.
Por desconocimiento, se indica en la Ciberguía, las víctimas los autorizan y con ello permiten que los delincuentes extraigan información sensible sin que se den cuenta.
Con los datos obtenidos, los “montadeudas” amenazan, desprestigian y extorsionan a los usuarios no sólo para pagar su deuda, sino que exigen también cantidades de dinero que no corresponden al crédito adquirido o aumentan los intereses sin previo aviso.
Para lograr su objetivo ilícito, los delincuentes pueden atraer la atención de las víctimas con publicidad engañosa.
Además, utilizan los datos extraídos ilegalmente del teléfono del usuario para difamarlo entre sus contactos y redes sociales, y hostigándolo para que pague.
En ocasiones elaboran fotomontajes e historias falsas que comprometen la reputación de sus víctimas.
Aunque el afectado busca detener la situación, los servicios no tienen oficinas físicas. La posibilidad de llegar a un arreglo es casi nula, ya que la mayoría de las empresas son falsas.
Incluso cuando la deuda sea saldada, los delincuentes pueden seguir exigiendo pagos. El destino de la información extraída es incierto.
Las autoridades sugieren, a través de Ciberguía, no dejarse llevar por la necesidad para obtener un crédito ni entregar información personal, como fotografías de identificaciones oficiales o tarjetas bancarias.
Se recomienda acudir únicamente a instituciones financieras reguladas por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
El hecho de que una app esté en una tienda oficial no garantiza que sea segura, concluyó la autoridad.
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