Espectáculos
Mentiras el musical que convirtió actrices en estrellas sin pedir disculpas
Un musical que lanzó estrellas y acumula versiones más rebuscadas que un menú de Starbucks.

El musical que nadie pidió pero todos vieron… 16 años después
Ah, Mentiras, ese fenómeno teatral que lleva más años en cartelera que el compromiso de un político corrupto. Con tantas versiones como excusas tiene un adolescente para no lavar los platos (MentiDrags, Mentiverso, el concierto, la serie…), este engendro cultural no solo ha entretenido a legiones de fans, sino que también ha servido de trampolín para actrices que, digámoslo claro, probablemente agradecen o maldicen su participación, dependiendo del día.
Las “afortunadas” que sobrevivieron al casting
Mariana Treviño, la original Lupita en 2009, demostró que salir de un musical no te condena a cantar en bodas forever. Tras su paso por Club de Cuervos y películas con títulos más largos que un discurso de AMLO, ahora vuelve a Mentiras (¿nostalgia o necesidad de pagar la hipoteca?). Eso sí, es la única que logró saltar del escenario a la pantalla sin caer en el olvido. ¡Aplausos!
Natalia Sosa, quien ya había cantado más veces que un gallo en Los Miserables, encontró en Daniela su personaje estrella… solo para luego esfumarse en Mérida produciendo teatro. ¿Fue el reality con Yuri el detonante? El mundo nunca lo sabrá.
La tarde nos recuerda con cariño a Hiromi Hayakawa (q.e.p.d), quien en Mentiras interpretó a todos los personajes femeninos y alguno masculino, porque ¿para qué conformarse con uno? Su versatilidad fue tan legendaria como su doblaje de Mérida en Valiente (ironías del destino).
Mónica Huarte, la reina del cine indie con títulos que suenan a poemas de café barato, usó Mentiras para demostrar que también podía cantar. Luego se dedicó a obras con nombres más sofisticados que un vino orgánico, aunque su momento cumbre fue compartir pantalla con Ronaldo y Messi (¿quién dijo que el arte no paga?).
Y cerramos con Mauricio Martínez, el único hombre en esta lista porque, seamos honestos, en los musicales los galanes son como unicornios: todos hablan de ellos pero nadie los ve. De Operación Triunfo a Broadway, pasando por Mentiras, donde dejó el listón tan alto que luego se mudó a Nueva York para no tener que competir consigo mismo.
¿Moraleja? Si quieres fama duradera, empieza en un musical… o al menos aprende a fingir que te gustan los coros.
¿Te sorprendió alguna de estas trayectorias? Comparte este artículo y etiqueta a ese amigo que todavía cree que los musicales son “fáciles”. ¡Y no te pierdas más historias de famosos que jurarías no tenían pasado teatral!
Espectáculos
Florinda Meza revela la verdad detrás de su romance con Chespirito
La historia de amor que desafió convenciones y terminó siendo un legado más duradero que la fama.

Un amor que empezó como un guión de telenovela (pero sin comerciales)
Si pensabas que los dramas de Florinda Meza y Roberto Gómez Bolaños (aka Chespirito) solo ocurrían frente a las cámaras, prepárate para un plot twist digno de Netflix. Resulta que su romance fue más complicado que un capítulo de La Rosa de Guadalupe, con todo y esposa, seis hijos y una atracción que tardó ocho años en concretarse. ¿Culpa? Cero, según Florinda. Y eso que la exesposa de Chespirito, Graciela Fernández, hasta le marcó para decirle lo que pensaba. Spoiler: no fue un mensaje de amor.
De “La Media Naranja” al corazón de Chespirito: un casting que cambió todo
Todo empezó en los 70, cuando Florinda era una actriz emergente (sí, antes de ser la Doña de El Chavo) y Roberto ya era un genio de la comedia… pero casado. En una entrevista vintage con EL UNIVERSAL, Meza soltó la bomba: “A donde vaya don Roberto iré yo, bueno si él me lleva”. O sea, desde ahí se notaba que la química no era solo para las cámaras. Eso sí, Chespirito, siendo un caballero (o quizá evitando un escándalo), decidió esperar casi una década antes de dar el paso. ¿Motivo? Él mismo lo admitió: “No quise ser el típico que cambia empleo por cama”. Un aplauso por la honestidad, don Roberto.
Pero cuando al fin se dieron el sí, fue para siempre. O casi, porque la muerte los separó en 2014. Chespirito no solo le regaló a México risas eternas, sino también una declaración de amor épica: “Con Florinda todo maravilloso… lo hubiera cambiado todo por ella”. Incluso el éxito, el dinero y la fama. ¿Qué tal? Hasta Taylor Swift se queda corta con esos versos.
La llamada incómoda y las “siete valijas” del pasado
Aquí viene el drama: Graciela, la exesposa, llamó a Florinda para soltarle un “mi coraje es con él, no contigo”. Y aunque en el momento Meza lo tomó como un “whatever”, años después lo entendió: “Fue un gran paquete que me quitó de encima”. Imagínate la escena: una llamada más intensa que el final de Rebelde, pero sin banda sonora de RBD.
Por si fuera poco, Florinda también tuvo su propio lío amoroso con el director Enrique Segoviano (casi se casan, pero al final ese guión se archivó). Aunque, comparado con el historial de Chespirito —“seis hijos, una esposa y siete valijas de pasado”—, ella salía ganando. Eso sí, cuando hablaban del tema, mejor “dejaban de hablar”. Relatable, ¿no?
Al final, su historia fue tan icónica como los programas que crearon juntos. Y aunque Florinda nunca se sintió culpable, sí guarda un aprendizaje: el amor, como los chistes, a veces requiere timing perfecto.
¿Te sorprendió esta historia? Compártela y descubre más secretos de tus celebridades favoritas en nuestras redes. #ChespiritoSiempre
Espectáculos
Fey, Ana Bárbara y Marta Sánchez brillan en Dancing Queen
Tres divas del pop unen fuerzas en un show lleno de nostalgia y energía que conquistó al público.

Un encuentro de reinas del pop en el Auditorio Nacional
El Auditorio Nacional fue testigo de una noche mágica donde tres íconos de la música latina, Fey, Ana Bárbara y Marta Sánchez, se unieron en la segunda edición de Dancing Queen. El evento, celebrado ante un público entregado, combinó nostalgia, talento y producción escénica, consolidándose como un homenaje a décadas de éxitos musicales.
Un inicio con altibajos y momentos memorables
La velada comenzó con un medley de “Dancing Queen”, tema que dio nombre al espectáculo. Sin embargo, el debut no estuvo exento de contratiempos: Marta Sánchez enfrentó problemas técnicos con la pista durante su primer bloque, que incluyó temas como “Soy Yo” y “La que Nunca Se Rinde”. Pese a ello, la artista española demostró profesionalismo al superar el incidente, recordando al público sus 40 años de trayectoria y anunciando un nuevo disco para noviembre.
Aunque el Coloso de Reforma no alcanzó su aforo total (con un 75% de ocupación), el ambiente fue cálido y participativo. Ana Bárbara aprovechó para rendir tributo al mes del orgullo LGBTQ+, dedicando palabras de agradecimiento a su audiencia: “Los amo”, expresó antes de interpretar clásicos como “La Trampa” y “No Es Brujería”, esta última junto a Marta Sánchez.
Interacciones y colaboraciones destacadas
El concierto, estructurado en bloques individuales y colaboraciones, permitió a cada artista brillar con su repertorio. Fey sorprendió con un mix de sus éxitos dance, incluyendo “Media Naranja” y “Bajo el Arcoíris”, mientras que Ana Bárbara electrizó con “Bandido” y “Besos Robados”. Marta Sánchez, por su parte, evocó emociones con baladas como “Colgado en Tus Manos”.
Uno de los momentos más emotivos llegó cuando Fey compartió un mensaje dedicado a su hija Isabella: “Gracias por amarme”, declaró, reflejando la importancia de su familia en su carrera. La presencia de invitados como Luz Elena González y el hijo de Ana Bárbara añadió un toque íntimo al espectáculo.
Un final a la altura de las leyendas
El cierre incluyó una inesperada incursión en la música tradicional mexicana: Fey interpretó “Caray” con mariachi, seguida por Marta Sánchez (“Volver, Volver”) y Ana Bárbara (“Así Fue”). La noche culminó con la repetición de “Dancing Queen”, donde artistas y público cantaron y bailaron al unísono, sellando una velada que celebró la diversidad musical y el legado de estas tres divas.
¿Te lo perdiste? Comparte este artículo y descubre más coberturas de eventos exclusivos en nuestras redes sociales. #DancingQueen #MúsicaLatina
Espectáculos
Felipe VI concede a Luz Casal el título de Marquesa de la Luz y Paz
La cantante recibe un honor histórico mientras el monarca celebra una década en el trono con distinciones sin precedentes.

Un reconocimiento histórico en el reinado de Felipe VI
En un acto sin precedentes desde su ascenso al trono hace once años, el Rey Felipe VI ha otorgado el título nobiliario de Marquesa de la Luz y Paz a la icónica cantante Luz Casal, figura central del pop rock en español. Esta distinción, anunciada durante las celebraciones por el undécimo aniversario de su reinado, marca un hito en la política de honores de la Corona, que hasta ahora había evitado conceder títulos nobiliarios.
La reacción emocionada de una leyenda musical
La artista, de 66 años, manifestó su sorpresa y gratitud a través de un emotivo mensaje en redes sociales, donde confesó sentirse abrumada por la distinción. “Aquí tienen a una mujer cuyo estado actual es una mezcla de perplejidad, alegría, pudor y agradecimiento”, escribió Casal, cuestionándose incluso si su trayectoria justificaba tal honor. La intérprete de éxitos como “Piensa en Mí” reflexionó sobre los valores que han definido su carrera: modestia, lealtad y la ética del trabajo constante, atribuyendo su éxito a un carácter “voluntarioso e indomable” que le permitió superar adversidades.
Un abanico de distinciones a figuras clave
Este nombramiento forma parte de una serie de condecoraciones a personalidades españolas destacadas. El tenista Rafael Nadal recibió el título hereditario de Marqués de Llevant de Mallorca, mientras que la nadadora paralímpica Teresa Perales fue designada Marquesa de Perales, también con carácter hereditario. En el ámbito científico, el bioquímico Carlos López Otín obtuvo el Marquesado de Castillo de Lerés (vitalicio), y la fotógrafa Cristina García Rodero se convirtió en Marquesa del Valle de Alcudia.
Contexto y significado de los títulos nobiliarios
Estas distinciones, reguladas por el Real Decreto 222/1988, representan un gesto estratégico para vincular la monarquía con sectores contemporáneos más allá de la tradición. Los títulos hereditarios (como los de Nadal y Perales) perpetúan el legado familiar, mientras que los vitalicios (como el de López Otín) reconocen contribuciones excepcionales. El caso de Casal es particularmente simbólico, al fusionar en su título (Marquesa de la Luz y Paz) conceptos que reflejan tanto su nombre artístico como su influencia cultural.
Analistas señalan que este movimiento refuerza la imagen moderna de la Corona, asociándola con valores como la excelencia profesional y la diversidad. Datos del Ministerio de Justicia revelan que solo el 3% de los títulos nobiliarios concedidos en las últimas décadas han correspondido a mujeres, lo que añade relevancia al reconocimiento de Casal y Perales.
¿Qué opinas sobre esta nueva etapa de distinciones reales? Comparte este análisis en tus redes sociales y descubre más contenido sobre cómo evolucionan las tradiciones en la España contemporánea.
-
Nacionalhace 3 horas
Solo 9 sentencias en seis años contra el huachicol en México
-
Espectáculoshace 4 horas
Laisha Wilkins podría pagar 200 mil pesos por un tuit y lo convierte en donación
-
Espectáculoshace 3 horas
Claudia Martín y Carlos Said oficializan su matrimonio civil
-
Nacionalhace 13 horas
La exabogada de El Chapo asume como jueza penal en Chihuahua
-
Internacionalhace 8 horas
Tragedia en Praia Grande tras incendio de globo aerostático
-
Tecnologíahace 7 horas
Secretos ocultos de Alexa que cambiarán tu experiencia en casa
-
Internacionalhace 8 horas
Militares permanecen en prisión por crimen de adolescentes en Ecuador
-
Nacionalhace 8 horas
Sheinbaum denuncia maltrato a migrantes y defiende gestión energética en Yucatán