TIJUANA, Baja California. Los niños que viven en uno de los albergues para migrantes de Tijuana continúan sus estudios gracias a un proyecto que lleva a cabo una organización humanitaria. Se trata de la que creó la para impartir clases virtuales durante la pandemia de Covid-19.
“Me gusta mucho, puedo retomar lo que antes había visto, es muy divertido venir a la escuela”, dijo Ana Isabel, una niña proveniente de Honduras y que asiste a las clases virtuales. Ana Isabel aspira a ser odontóloga.
“A mí me gustan mucho las matemáticas, a veces se me dificultan porque son muy difíciles, pero es la materia que más me ha gustado”, agregó la menor que al emigrar de su país interrumpió sus estudios en el quinto grado de primaria.
Su mama Inés, quien junto con su hija llegó a la frontera norte de México procedente de Centroamérica en busca de asilo en Estados Unidos, considera que la escuela digital es una idea muy buena porque ayuda a los niños a no dejar de aprender.
“Desde que salimos de mi país ella no había seguido estudiando, ya serían casi dos años perdidos para ella”, mencionó la madre.
Otro de los niños que reciben clases en línea en la escuela digital es originario de Michoacán, de donde su familia tuvo que huir por la violencia.
A la espera de que Estados Unidos atienda su solicitud de asilo, el niño es uno de los más de 50 menores migrantes que se encuentran en el albergue donde se imparten las clases virtuales.
En los últimos años, según datos de la , Estados Unidos ha registrado alrededor de 1.7 millones de solicitudes de asilo, pero menos del 10% son aprobadas.
ACNUR refiere que el actual fenómeno migratorio obliga al abandono escolar y deja a los niños en la vulnerabilidad.
, fundadora de International Activist Youth, dijo que la intención del proyecto es apoyar a los niños migrantes y refugiados con sus estudios.
“A partir de mayo empecé a trabajar en este proyecto”, indicó, “es una escuela que está planeada para niños y niñas que están viviendo en albergues en la frontera noroeste”.
International Activist Youth es una que contribuye a hacer realidad la aplicación de los derechos humanos de jóvenes y niños en situación de deportación, migrantes y refugiados.
Actualmente las clases virtuales se imparten a los menores migrantes del albergue Embajadores de Jesús que están a la espera de que reabran la frontera para continuar con su proceso migratorio, pero mientras eso sucede, gracias a este proyecto los niños siguen yendo a la escuela, aunque un poco diferente a la que estaban acostumbrados.