La tragedia sacude el norte del país, dejando a miles de damnificados luchando contra el frío y la pérdida de sus hogares y monumentos históricos.
La ONU alerta sobre un aumento exponencial de víctimas mientras los equipos de rescate enfrentan enormes obstáculos para llegar a las zonas más afectadas.
Una tragedia de magnitudes épicas sacude la región, con miles de afectados y una carrera contrarreloj para los equipos de rescate.