El ejército y autoridades despliegan un operativo de emergencia ante la crecida crítica del río, evacuando familias mientras la tormenta no cede.
La mandataria supervisa la crisis en cinco estados y anuncia puentes aéreos para comunidades aisladas tras las devastadoras precipitaciones.
La furia del río arrasó con todo a su paso, activando los protocolos de emergencia más críticos del estado.
La fuerza del río sumerge colonias y deja a una población entera luchando contra la corriente, mientras la ayuda tarda en llegar.
Despliegue operativo militar y civil para contener los efectos de las precipitaciones. Coordinación total en tres regiones críticas del estado.
Las Fuerzas Armadas brindan auxilio a cientos de damnificados mientras las lluvias provocan severos daños en la infraestructura urbana.
Las precipitaciones récord desencadenaron caos urbano y movilizaron operativos de emergencia en la frontera norte.
La mandataria reconoce la rápida acción militar en zonas devastadas, donde la tierra se negó a cooperar.