La industria del entretenimiento lamenta la partida de una figura querida que dejó una huella imborrable en la pantalla chica.
El conductor canceló su programa para atender una emergencia de salud, generando una ola de solidaridad en redes sociales.
Un comunicador documenta en tiempo real su propia agonía en un pasillo hospitalario, mientras el protocolo se burla del sentido común.