Un giro audaz en la identidad visual del club rojinegro que redefine su legado estético.
Los Bravos estrenan look con un toque simbólico y un cambio de marca que promete dar qué hablar.
La esencia auriazul se reinventa con diseños inspirados en símbolos universitarios.
El equipo revive su icónico diseño de los 90 para la competencia internacional, combinando nostalgia y modernidad.