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Decenas de repartidores de las distintas aplicaciones de servicios de comida a domicilio, además de que se encuentran en el ‘limbo laboral’ debido a que carecen de prestaciones y seguridad social, padecen por la inseguridad en la capital del estado, ya que son de los principales perjudicados por el robo de motocicletas.
Desde hace cuatro años aproximadamente, a la fecha, el servicio de reparto de alimentos a través de las apps como Uber Eats, Rappi y DiDi Food, ha ido en ascenso, representando una fuente de empleo principalmente para aquellos que disponen de una motocicleta.
Sin embargo, es común que estas empresas no se hagan responsables del desgaste o daños a estos vehículos y mucho menos en caso de un accidente o robo que pueda sufrir el repartidor.
Ismael Cupil López, quien presta sus servicios mediante la aplicación de DiDi Food, aseguró que se han incrementado los robos de estas unidades, principalmente en la zona de Bosques de Saloya, donde son bajados a la fuerza y despojados del vehículo con amenazas, eventos en los que no reciben ningún tipo de apoyo por parte de la empresa de aplicación.
En tanto, Alejandro Jiménez Gómez, quien trabaja en Uber Eats, aseguró que gana entre 300 y 400 pesos diarios –y en los días de quincena hasta 900- sin embargo carece de un salario base, seguridad social y aguinaldo.
De acuerdo a datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en su apartado de ‘Incidencia delictiva’ en el modo de delitos de fuero común, se reportó que en el año 2022 hubo al menos 1,315 robos a motociclistas, mismo número de carpetas de investigación activas en el estado de Tabasco.
Edgar Azcuaga Cabrera, Secretario General de la Federación de Trabajadores Obreros de Tabasco (FTOT), lamentó la situación que están viviendo los trabajadores motociclistas en las plataformas digitales que están obteniendo un ingreso económico importante en la entidad: «Los patrones están obligados a inscribir a los trabajadores al IMSS, y se debe de cumplir La Ley Federal del Trabajo», sostuvo.
Azcuaga Cabrera invitó a los trabajadores a que busquen las oficinas de la FTOT en Tabasco donde se les orientará para regularizar su situación laboral en este tipo de empresas.
Con seis iniciativas en el Congreso de la Unión para regular el trabajo en plataformas digitales, los legisladores se encuentran en el escenario perfecto para trabajar con las propuestas actuales y diseñar la reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) para reconocer los derechos laborales de conductores y repartidores por aplicaciones. Aunque se anticipa un escenario complejo para la reforma, también puede ser la oportunidad de incorporar nuevos modelos laborales en la legislación mexicana.
“Va a ser un proceso complejo como sucedió con el outsourcing. Me parece que esto va a ser complejo, pero será la puerta de entrada a muchísimos otros modelos laborales que aparecerán de la mano de la revolución tecnológica en el presente y el futuro del trabajo. El camino lo van a abrir los trabajadores de plataformas de por dónde tenemos que trabajar y generar la justicia laboral”, expuso la senadora Patricia Marcado (MC) durante una mesa de análisis de la organización Nosotrxs.
De acuerdo con la Encuesta nacional de conductores y repartidores de aplicaciones en México de Uber, el 90% de los conductores y repartidores valora el control sobre su propio horario y el 66% dejaría la actividad si se pierde la flexibilidad. Esta condición de trabajo será una de las claves en la regulación laboral de las plataformas digitales.
“Tenemos que llegar a un equilibrio donde los trabajadores repartidores puedan tener seguridad social y estén protegidos, pero que también puedan mantener la flexibilidad en el empleo como hoy la tienen, que puedan trabajar por horas, por tiempo extra, que puedan trabajar con diferentes patrones, pero que esto no los lleve a la precariedad”, apuntó la senadora Xóchitl Gálvez (PAN).
Trabajan ocho horas diarias por lo menos, para llevarse entre 300 y 400 pesos, pero sin ningún tipo de protección o respaldo
Uber Eats, Rappi y DiDi Food son las principales aplicaciones que operan en el estado