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La titular de la Secretaría de Salud del Estado, Silvia Roldán Fernández, advirtió que el virus del COVID continuará y otras epidemias más se propagarán, por lo que llamó al personal de salud a estar listo en equipos multidisciplinarios y de profesionales, así como también con capacidad de gestionar recursos, y así, mantener la guardia arriba.
«El COVID va a continuar con nosotros, que surgirán -a lo mejor- epidemias y nuevas epidemias que pueden ser mayores, desde cualquier lugar del planeta. Si bien la viruela del mono no es una epidemia que se haya extendido como para pensar que tenemos un problema serio, ahí está. Y tenemos casos y tenemos que estar preparados para esto y para mucho más. Seguramente se propagarán más rápido. Entre más comunicaciones, más fácil de propagar», aseveró.
Al inaugurar el Segundo Congreso Académico Internacional del ISSET, la titular de Salud en Tabasco, en representación del gobernador Carlos Merino Campos, reconoció que ante este desafío, el sector salud debe de estar prepararse en gestión de recursos e incluso, contar con un fondo similar al de inundaciones, para afrontar las próximas epidemias, defendiendo la salud pública.
«Debemos prepararnos para gestionar y destinar recursos y para poder mantener la guardia arriba, es necesario retomar y fortalecer una visión global centrada en la equidad y la sostenibilidad, y es apremiante que todos, comenzando por los profesionales de la salud, impulsemos el concepto de una sola salud y de una sostenibilidad ambiental», indicó.
Añadió que esta pandemia ha resituado esta problemática que conecta directamente a la salud pública, a la seguridad, a la alimentaria, al control de la zoonosis, a las resistencias bacterianas y al cambio climático.
Ante el director del ISSET, Fernando Mayans Canabal y la directora de la División Académica de Ciencias de la Salud de la UJAT, Miriam Carolina Martínez López, sostuvo que este escenario inmediato de pandemias, es necesario que la comunidad médica se integre en equipos interdisciplinarios y profesionales, porque la pandemia del COVID demostró que hacían falta, por ejemplo, neumólogos y epidemiólogos.
«El futuro nos alcanza con un entorno desafiante que va a requerir de equipos multidisciplinarios y de profesionales de la salud con mucha inteligencia. Y es por eso, que el evento de hoy es importante, y son el primer paso para estar en condiciones de poder cumplir el compromiso que tenemos con la salud de la sociedad a la que servimos, el poder intercambiar experiencias de otros países, el ir viendo qué podemos hacer igual e incluso ellos que podrían copiar de este estado que no es México completo, pero que tiene la experiencia como la han tenido todos los estados en el país», apuntó.
En su discurso inaugural de este congreso que lleva como lema “La nueva realidad de la medicina tras la pandemia”, Roldán Fernández hizo un balance de las debilidades que exhibió la pandemia del COVID en el sector salud, no sólo de México, de Tabasco y de todo el mundo, pero también desglosó las fortalezas que hubo del personal.
Destacó que el personal de salud de Tabasco pasó la prueba, sobre todo cuando hubo la necesidad de salir a delimitar la propagación de la pandemia, como también la entereza de permanecer en sus puestos en los momentos más álgidos, de tal forma, que muchos fallecieron.
«Nuestro sistema de vigilancia epidemiológica pasó la prueba. Tiene oportunidades de mejora, pero desde luego, pasó la prueba. El capital humano, todos ustedes, todos los que estuvieron, todos mostraron disposición, compromiso y entrega. Nosotros, todos también tenemos algún compañero que perdimos por estar en la batalla. No, que perdimos, porque se fue de de resguardo y no se cuidó en su ambiente donde estaba y se enfermó y se murió. No, de los que tuvimos en batalla, de los que se quedaron médicos, enfermeras y bueno, pues eso fue complicado, muy complicado», acotó.
Roldán Fernández también mencionó el sector salud de Tabasco consiguió que ahora la entidad tenga de los índices más altos de vacunación en el país, pero insistió que ahora le toca corresponder a la población, llevando a vacunar a los niños de 5 a 11 años, que ante su rezago, son el grupo más vulnerable al contagio.
«Necesitamos que los niños de 5 a 11 años reciban su segunda dosis, porque si recuerdan que tuvimos mucha presión para vacunar a los niños de cinco años, ¿no? Y ahora que tenemos la vacuna, pues ahí andamos empujando este, el que se apliquen la vacuna de 5 a 11 años», refirió.
Recalcó que el cubreboca, a como el lavado de manos y sana distancia, fue de las “balas de oro” para afrontar el COVID, por lo que exhortó al personal de salud a dar el ejemplo con su uso.
«La pandemia no se ha acabado, cuando ustedes están en lugares cerrados que no tienen ventilación, cuidado, porque para eso es el cubrebocas. Y si nosotros los que trabajamos en salud no damos la muestra, pues entonces está complicado que la gente identifique que sí lo debemos de hacer», precisó.
La titular estatal de Salud planteó que ahora al sector salud le toca atender los padecimientos post-COVID, como las enfermedades que se dejaron de atender por la emergencia sanitaria.
«Todo lo que dejamos de hacer en dos años, en este momento lo tenemos ya en las puertas de los hospitales y de las unidades de salud. Y desde luego, en dos años nos dedicamos a la atención de la pandemia y a las actividades de la vacunación masiva, que no es poca cosa. Es decir, el tema de la vacunación se llevó una gran cantidad de dinero, se llevó una cantidad de personal permanentemente para poder cubrir la mayor parte de la de la población», sostuvo.
Se trata de un nuevo escenario, expuso, en el que sector salud – a como todos los sectores de la sociedad- tiene que diseñar su estrategia de salud pública, desde la plataforma de lo sucedido con la pandemia del COVID, porque, remarcó se trata de atender ahora una problemática de enfermedades crónicas y pandemias que aumentan la letalidad de la población.
«Años de años de estar hablando que las enfermedades crónico de degenerativas estaban en transición con las infecciosas y que iban a llegar y que nos estaban rebasando hasta que lo vimos totalmente rebasado con nuestro propio personal. En esta parte de la de la diabetes, de la obesidad, de las enfermedades cardiovasculares y las neoplasias, ahí justo está el exceso de la mortalidad. El futuro de la salud pública debe construirse, prácticamente, desde la plataforma de la pandemia de COVID 19. Este virus hizo el mundo y volver a ver la importancia de la salud pública», apuntó.
En su intervención, Fernando Mayans, director del ISSET, expuso la importancia de defender la seguridad social, y en ese sentido, se refirió a la iniciativa reforma a la ley vigente en la materia, que está pendiente de su análisis y discusión en el Congreso del Estado.
Expresó que su sueño, como director, parafraseando a Martín Luther King, es transformar al ISSET con una cultura de seguridad social, a partir de la reforma de ley que está en puerta, la cual plantea modificaciones para una estructura financiera que permita ampliar la cobertura de salud y garantice las prestaciones de los trabajadores de los municipios y del Estado de Tabasco.
Propone una nueva ley que permita al Instituto transformarse para atender, sobre nuevas bases financieras la delicada situación que enfrenta, brindar mayor protección elevar la calidad de servicio, ampliar su cobertura y mejorar las condiciones en las que se otorgan las prestaciones.
