Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de los Servicios de Perinatología del Hospital de Gineco-Obstetricia No. 3 y de Cirugía Plástica Reconstructiva Pediátrica del Hospital General del Centro Médico Nacional (CMN) La Raza, corrigen el labio hendido en los bebés que presentan este padecimiento al momento de nacer.
La cirugía intraparto (Simil Exit) cuyo procedimiento es único e innovador en el IMSS, se proporciona al recién nacido con labio hendido, (tejido sin unir completamente antes del nacimiento y que ocasiona una abertura en el labio superior,) un tratamiento quirúrgico inmediato que le permite iniciar oportunamente su alimentación con un impacto positivo en su desarrollo.
El objetivo de la cirugía es abordar la deformidad anatómica, funcional y cosmética del labio hendido de forma inmediata. La reparación incluye la formación de un labio superior de tamaño apropiado para la succión y la reparación primaria de la deformidad nasal. A la fecha se han realizado 40 correcciones quirúrgicas a bebés recién nacidos.
El doctor Edgar Mendoza Reyes, jefe del Departamento de Perinatología de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) de los Servicios de Perinatología del Hospital de Gineco-Obstetricia No. 3 “Dr. Víctor Manuel Espinosa de los Reyes Sánchez”, explicó que el diagnóstico se realiza en el control prenatal mediante ultrasonido entre la semana 18 a 22 de gestación.
Abundó que una vez establecido, se descarta algún problema estructural asociado en el feto y con una vigilancia estrecha es programada la paciente para cesárea después de la semana 38.
Mendoza Reyes dijo que la cirugía para corregir el defecto anatómico se realiza en el momento del nacimiento, extrayéndose parcialmente al feto para mantener la circulación placentaria (materno–fetal), por lo cual permanece una parte de su cuerpo dentro del útero de la madre durante el procedimiento.
“Una vez reparado el defecto en un tiempo promedio de 25 minutos, se extrae completamente al recién nacido, se pinza y corta el cordón umbilical y se entrega al Servicio de Neonatología para su vigilancia postquirúrgica”, señaló.
Por su parte, el doctor Fernando Rivera Malpica, adscrito al Servicio de Cirugía Plástica Reconstructiva Pediátrica de la UMAE Hospital General, informó que las fisuras del labio y paladar son las malformaciones craneofaciales congénitas más frecuentes, con una incidencia en uno de cada 750 recién nacidos vivos.
Informó que de acuerdo a los protocolos de manejo, los niños con labio y paladar hendido para ser candidatos a una corrección quirúrgica deben contar con más de 10 semanas de nacido, 10 gramos de hemoglobina, 10 libras de peso y menos de 10 mil leucocitos. “Con estos requisitos puede someterse a cirugía entre el tercero y sexto mes de vida o en ocasiones hasta el año y medio de edad”.
Rivera Malpica subrayó que este equipo multidisciplinario de ambos hospitales se propuso, desde hace tres años, cambiar los tiempos de atención quirúrgica con la finalidad de mejorar las condiciones del bebé, con la intención de que este procedimiento sea replicado en otros hospitales a nivel nacional.
“Si nosotros no efectuamos la reparación del labio en el momento del nacimiento, el procedimiento se hubiera tenido que realizar a los tres meses de vida; periodo en el cual el bebé tiene muchas dificultades para alimentarse, nutrirse, ganar peso y mantener una hemoglobina aceptable”, dijo.
El especialista del IMSS explicó que al cerrarse de forma inicial el labio, los segmentos palatinos que están abiertos se alineen y se hagan simétricos, lo cual facilita la cirugía del cierre del paladar que se realiza al año y medio de edad.
Posterior a esta primera cirugía, cuando el bebé cumple año y medio de edad, se le da seguimiento en el Hospital General “Dr. Gaudencio González Garza” de este mismo complejo hospitalario, para continuar con los procedimientos quirúrgicos de reparación del paladar, la nariz y la cicatriz.
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