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Como parte de su gira de trabajo para constatar los beneficios del Programa de Proyectos Estratégicos, otorgado a tres talleres artesanales de la entidad, este sábado la directora del Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart), Emma Yanes Rizo, en compañía de la directora general del Instituto para el Fomento de las Artesanías de Tabasco (IFAT), Tisve Salazar Ramos, visitó dos talleres artesanales del municipio de Nacajuca.
Durante un recorrido por el taller de Cerámica y Alfarería Casa Muriel, Yanes Rizo se mostró muy contenta por el éxito que -dijo- han tenido los apoyos del Gobierno Federal en el estado.
En Casa Muriel dirigida por la artesana María del Rosario Bautista Prudencio, se elaboran piezas de alfarería tales como vajillas, tazas, lámparas, floreros, entre otros.
Este taller, resultó beneficiado con 120 mil pesos que contribuyeron a mejorar y acondicionar el espacio físico de las áreas de producción y exhibición.
«Estamos muy contentos de parte de FONART, del éxito que han tenido los apoyos del Gobierno Federal en el estado. En particular estamos haciendo el recorrido de lo que nosotros llamamos los proyectos estratégicos. Consisten básicamente en puntos de trabajo, puntos de talleres que sabemos que van a generar no solo una economía familiar, sino que puede trascender a las comunidades de la propia región, y desde luego al estado», puntualizó.
En su oportunidad, la funcionaria federal destacó el buen uso de los recursos otorgados a los artesanos que resultaron beneficiados gracias a un diagnóstico realizado por el Gobierno del Estado a través del IFAT.
«Estamos haciendo un recorrido para fortalecer lo ya hecho, que es lo primero y seguirlos invitando a que participen en los concursos tanto regionales como nacionales, porque Tabasco ha dado una sorpresa en ese sentido, se está viéndose como que no tenía propiamente un nivel artesanal comparado con Oaxaca, Chiapas y ahora ha demostrado que con la minuciosa dedicación por ejemplo en fibras naturales pueden llegar a niveles muy altos que signifiquen además ingresos importantes para las familias y desde luego en el contexto del Tren Maya van a conseguir espacios nuevos y muy importantes», añadió.
La alumna Monserrat de Jesús de la O García, del taller Casa Muriel, quien forma parte del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, compartió lo que ha aprendido durante ocho meses en este taller, e invitó a los jóvenes para que se acerquen y aprendan las técnicas artesanales que se realizan y que para ella -subrayó- han resultado impresionantes.
«Que no se queden solamente en casa, sino que también salgan a aprender, esto no solo es un aprendizaje, porque en un futuro puede ser un emprendimiento, aquí por ejemplo ya se han vendido tazas que hemos hecho nosotras, labrados, hemos decorado.Se aprenden muchas cosas, y es más artesanía para nosotros los tabasqueños», manifestó.
En compañía del Director de Desarrollo Comunitario y Producción Artesanal del IFAT, Abad José González Hernández, las funcionarias, también visitaron el taller del artesano de fibras vegetales, Sebastián de la Cruz Hernández, ubicado en Ranchería La Cruz del municipio de Nacajuca.
Este taller se dedica a la elaboración de piezas artesanales tejidas con lirio acuático, palma y corazón de caña, mejor conocida como cañita.
Como parte de los 120 mil pesos otorgados por el Fonart, en este sitio se implementaron acciones para la mejora del cultivo de cañita con el fin de satisfacer la demanda comercial, explicó de la Cruz Hernández.
«Con el programa de proyectos estratégicos nosotros logramos plantar esa cañita que ahora ya nos está sirviendo para lo que es la elaboración de la artesanía. Ahora ya no elaboramos nada más petate ahora se elaboran petates, se hacen lámparas, se hacen tapetes para lo que es la mesa comedor y un sinfín de piezas», precisó.
En este lugar, la directora del Fonart visitó el terreno donde los artesanos sembraron 120 plantíos de cañita.
El Programa de Proyectos Estratégicos, PAE-012-2019, otorgado a tres talleres artesanales de la entidad, consta de una derrama global de 360 mil pesos, con 120 mil pesos aportados a cada uno.
