. En esta temporada invernal llegaron a Mazatlán alrededor de , a pesar de las restricciones por la pandemia del Covid-19.
La consulesa de Canadá en Mazatlán, Wendy Hardouin, reconoció que la temporada alta de llegada de extranjeros tuvo algunas complicaciones, pues pero que todo se normalizó.
“Han tenido que cancelar varios vuelos por la pandemia, Canadá tuvo principalmente problemas de no poder viajar y tuvo la necesidad de cancelar unos vuelos y cambiarlos por otros, pero esperamos que para el otro año sea mucho mejor”, señaló.
En 2018 eran alrededor de dos mil canadienses jubilados los que ya vivían en Mazatlán, mientras que llegaban alrededor de 15 mil durante la temporada invernal. Ahora, la cifra de los que radican aquí se duplicó.
La agente consular reconoció que este año no fue lo esperado en el arribo de canadienses, pero que alrededor de dos mil llegaron para quedarse a radicar en este destino turístico.
“Este año no fue muy bueno esperamos que para el próximo todo mejore, la ventaja de los canadienses es que la mayoría están vacunados y eso nos facilita más la venida aquí, lo que sí aumentó fueron los residentes jubilados que llegaron para vivir en Mazatlán, este año son como dos mil más, son bastantes”, dijo.
Reiteró que cada año crece el interés de los jubilados por vivir en Mazatlán, pues están comprando casas o condominios y están aportando a la comunidad.
Aseguró que a los canadienses les encanta Mazatlán no sólo porque es un lugar turístico, sino porque tiene su Centro Histórico, cultura y es familiar.
“Los canadienses eligen a Mazatlán para vivir porque es muy parecido a Canadá y es lo que están buscando”, expresó.
Confió en que la situación sanitaria siga a la baja para que el próximo año lleguen más canadienses, para lo cual las asociaciones de hoteles ya trabajan con mayoristas para que regresen los vuelos.