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CIUDAD DE MÉXICO.- Por su interpretación del “Charro de Huentitán” en su adolescencia en la serie El Rey, Vicente Fernández, al actor Sebastián García Huerta todos en su escuela le dicen “Chente”, hasta su maestra de matemáticas.
Lejos de molestarlo, él se alegra, pues cree que eso demuestra el mimetismo que logró con el rol, el cual compartió con Jaime Camil (adulto), Sebastián Dante (adulto joven) y Kaled Acab (niñez).
Al ser una serie que no se cuenta de forma lineal, sino que se adelanta en el tiempo y regresa, los cuatro tenían apariciones en distintos momentos de los episodios y se podía prestar a la comparación, pero creen que al prepararse para ello pudieron encantar al público.
“En las escenas de Kaled había una carrera con un caballo y nosotros lo hacíamos también, íbamos corriendo contra el caballo para que no sólo estuviera el referente de lo escrito en el guion, sino también en nuestros cuerpos se sintiera esa experiencia que vivió Vicente niño”, contó Dante en entrevista.
“Hicimos lo mismo con el adolescente, cuando trabaja en el bar y es explotado, todos sentimos eso. Fue muy padre trabajar con ellos esa construcción porque había el riesgo de ver a los Vicentes al mismo tiempo, porque podían brincar, somos personas muy distintas, pero al final logramos homogeneizar”.
Como prueba del éxito, los promotores de la bioserie de Netflix indican que se posicionó como la más vista de contenidos en español en el mundo y tuvo más de 100 millones de horas de reproducciones en sus primeras cinco semanas.
Acab, Dante y García Huerta saben que lo primero que le interesó a la audiencia fue el nombre del intérprete de “Por Tu Maldito Amor”, pero creen que también pudieron atraparlos por el estilo narrativo, que incluso muestra el contacto de “Chente” con la muerte, representada por un charro.
“Es un acierto haber puesto esta alegoría, este concepto representado por un actor. Nuestra narrativa como latinoamericanos siempre ha estado empapada por surrealismo y realismo mágico, esa forma de contar historias con personajes mágicos siempre va a ayudar a sumergirnos y emocionarnos.
“Vicente sí tenía sus conflictos con la muerte, si bien no se le aparecía alguien vestido de charro, sí tenía ese duelo constante con lo que significaba. Imaginar tener la posibilidad de crear estos escenarios me parecía muy interesante”, detalló Dante.
También se puede apreciar el trabajo vocal de los actores en el disco El Rey Vicente Fernández, que recopiló algunas de las canciones que ellos interpretaron para diferentes escenas.
“Grabamos muchas canciones que no están, Dante grabó como 50, yo cerca de 12 y sólo aparece una, pero la que aparece la disfruté muchísimo. Uno se fija mucho en los errores primero que en los aciertos, pero los cuatro nos escuchamos muy bien”, consideró García Huerta.
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