Tras perder la demanda que su exmarido, Johnny Depp, interpuso por difamación, Amber Heard ofreció una entrevista para hablar acerca de la batalla mediática que se desató en redes sociales, durante los dos meses de audiencias. La actriz aseguró que no le importa lo que piensen de ella, ni los juicios que puedan generarse de lo que vivió en su matrimonio.
Pese a que Heard había asegurado que esperaría unos cuantos meses antes de hablar con los medios, la actriz de 36 años concedió una entrevista a la cadena televisiva “NBC”, la cual será transmitida en dos partes, los próximos martes y miércoles de esta semana, a través del programa “Today”.
NO LE SORPRENDIÓ VEREDICTO
En los adelantos, Amber expresa que, en realidad, no le sorprendió que el veredicto favoreciera a Depp, ya que el actor es muy famoso y querido. “No los culpo. En realidad los entiendo. Él es un personaje muy querido y la gente siente que lo conoce. Es un actor fantástico”, reconoció la actriz de “Aquaman”.
Y estimó que la resolución, en favor del actor de 59 años, refleja la poderosa influencia mediática de Depp en Estados Unidos, pues en una demanda previa en que la acusó por difamación, en Gran Bretaña, fue Depp quien perdió el juicio.
OLA DE OPINIONES
Además, en las pequeñas capsulas anunciadas en el canal, Heard habla acerca de la ola de opiniones que sobrevino en redes sociales, que se dividieron en dos, pues hubo quienes apoyaron a la actriz y quienes la condenaron.
Para Amber, no es importante lo que las personas opinen en las redes sociales, pues aseguró que no conocen y tampoco deben saber todo lo que ocurrió en lo privado de su matrimonio. “No me importa lo que piensen de mí o tus opiniones sobre lo que pasó en la privacidad de mi hogar, en mi matrimonio, a puertas cerradas.
Aseguró que es por ello que no se toma personal los juicios que se han creado alrededor de su imagen, a pesar que hay muchas personas que consideran que merece ser tratada con odio y desprecio, postura que le parece injusta, pues reconoce que no hubo una representación equilibrada de los hechos y que fue puesta como la mala de la historia.