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Durante los últimos días, Reyes de la Calle se convirtió en una de las películas más vistas de Netflix en buena parte de los países donde presta servicios la plataforma. A pesar de que muchos se sorprendieron y le dieron una oportunidad con su llegada al catálogo, lo cierto es que no se trata de un film reciente. La producción protagonizada por Keanu Reeves se estrenó en 2008 y tuvo una recepción discreta en el cine, tanto en la taquilla como en la evaluación que hicieron los espectadores.
Las plataformas de streaming se convirtieron en una vidriera de alto alcance para producciones que quizás no tuvieron una buena repercusión en cine o en televisión tradicional y encuentran entre los usuarios una respuesta significativa que no lograron en sus formatos originales.
Eso fue lo que ocurrió, por ejemplo, con La Casa de Papel. Después de las dos temporadas iniciales, que tuvieron niveles de audiencia promedio en España, su llegada a Netflix la catapultó a la fama mundial y, por lo tanto, al estreno de nuevos capítulos.
Algo similar fue lo que ocurrió a Reyes de la Calle, o Street Kings por su nombre original en inglés. La película de acción presenta la historia de Tom Ludlow, un policía de la ciudad estadounidense de Los Ángeles, interpretado por Keanu Reeves, que en el marco de su tarea se enfrenta a situaciones de corrupción dentro de la institución. En medio de una situación personal complicada, además de resolver los crímenes que le asignan, debe lidiar con Asuntos Internos y con una estructura instalada dentro de la Policía.
La película, dirigida por David Ayer y que además de Reeves tiene en el elenco a otros nombres como Chris Evans y Hugh Laurie, tuvo un paso discreto por los cines. A pesar de que alcanzó una recaudación superior a los US$62.000.000, que le alcanzó para superar lo que se invirtió en el presupuesto, no fue muy recordada en la industria.
Al observar las calificaciones que le dieron tanto los sitios especializados como los usuarios, se observa un 6.8 en IMDb, la base de datos más grande del mundo sobre cine y televisión, y un 37 por ciento en Rotten Tomatoes, el sitio estadounidense más reconocido del planeta en lo que refiere a las reseñas y revisiones que realizan los espectadores sobre películas y series.