CANCÚN, Q. ROO.- Grupos de la sociedad civil, comunidades mayas y especialistas ecológicos y arqueológicos de la zona demandaron frenar la construcción del Tramo 5 del Tren Maya, pues la devastación que implica para la selva y sistemas de ríos subterráneos de la zona lo hacen inviable.
Acusaron que este tercer trazo del tramo que corre de Cancún a Tulum, modificado a petición de los hoteleros, no cuenta con estudios de impacto ambiental y pone en riesgo a la fauna y flora a su paso dentro del corredor biológico por el que pasa, y donde se instalarán muros de contención para proteger las vías que impedirán el tránsito e intercambio genético de los animales.
Además de que se construye sobre ríos subterráneos y cenotes, lo cual compromete la disponibilidad de agua dulce, de la única fuente en la Península, para consumo humano y abastecer a los ecosistemas de la región, a la par de representar un peligro latente por posibles derrumbes y socavones.
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“Se están gastando el presupuesto de la nación en una obra que no tiene sentido financiero, que es una amenaza para los ecosistemas, que va a contaminar el agua potable y que va a afectar al patrimonio natural y turístico de los mexicanos”, señaló Otto Van Bertrab, fundador de la organización “Centinelas del Agua”.
Explicó que los cenotes sobre los que pasa el Tramo 5 son las aberturas de más de mil 500 kilómetros de ríos subterráneos que llevan agua por toda la región hasta su salida al mar, por lo que de ser contaminados con aceites y desechos se perjudicaría todo este sistema hídrico natural, lo cual a su vez tendría un impacto negativo en el turismo que es atraído por estos cuerpos de agua, la selva y la vida silvestre.
“(Esto) es un llamado al presidente de la República a que vaya a visitar nuestras cuevas, nuestros cenotes, y para que venga a ver el trabajo que estamos haciendo con el monitoreo sistemático de fauna silvestre”, exhortó Raúl Padilla, presidente de “Jaguar Wildelife Center”.
Adicional a esto, comunidades mayas y ejidatarios son desplazados al verse supuestamente obligados a vender sus tierras para la construcción del Tren ya que no fueron consultados ni informados debidamente ni en su idioma al respecto, apuntaron Ana Por y Adriana Uex, de “Coordinadoras de mujeres mayas de Quintana Roo”.
Por lo tanto, de la mano de “Voto x el Clima”, estos grupos entre otros más se sumaron en la campaña “Sélvame del Tren” con el objetivo de detener las obras y llamar al diálogo a la Presidencia de la República para evaluar la mejor opción, sin ir en contra del proyecto ni del medio ambiente.