Tras la suspensión del retorno seguro para los desplazados triquis de Tierra Blanca Copala, comunidad de la región Mixteca de Oaxaca, que oficializó la Secretaría de Gobernación, las familias que permanecen en la Ciudad de México se manifestaron la tarde-noche de este domingo en el cruce de las avenidas Juárez y Eje Central, causando cierres viales en ambos sentidos.
Isabel, una de las jóvenes que ha participado en diversas manifestaciones en la capital del país, y quién resultó herida al caer de un techo de cristal en una protesta en Segob, reiteró que la suspensión del protocolo de retorno de los desplazados se trató de una simulación, luego de que la Segob optó por frenar el retorno tras romperse la mesa de diálogo por parte de una de la organizaciones sociales.
“Nuevamente nos vuelven a engañar, nos vuelven a ver la cara a las familias desplazadas, se supone que este 16 de mayo retornarían a Tierra Blanca. En el país existe el estado de derecho o solo son simulaciones”, condenó la joven.
El protocolo de retorno de las familias desplazadas se frenó oficialmente por las autoridades federales luego de que el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT), organización señalada de la violencia en Tierra Blanca, rompió las negociaciones y abandonó la mesa de diálogo, tras denunciar el asesinato de uno de sus militantes en Santiago Juxtlahuaca.
Ante ello, los desplazados triquis en CDMX recordaron que uno los acuerdos alcanzados era un “pacto de no agresión”, firmado entre integrantes del MULT y del MULTI, organización antagónica a la primera y denominada Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente. “Sería ilógico asesinar a uno de sus militantes a pocos días del retorno”, aseguraron.
En conferencia de prensa, Horacio Santiago García, uno de los líderes del MULTI, hizo hincapié en la necesidad de restablecer las mesas de diálogo y respetar la firma de los acuerdos alcanzados tanto por el gobierno federal, como por las autoridades de Oaxaca y la dirección política del MULT y el MULTI.
Durante estas mesas de diálogo, dijo, el MULT ha “hecho todo lo necesario para poder romper las mesas, presentando argumentos inválidos”.
“Una de nuestras demandas es la no simulación, en algunos casos el Estado Mexicano puede ser tan fuerte para desalojar con mil granaderos a los desplazados, y en otros ser tan débil ante un grupo que no permite continuar el proceso de retorno”, recriminó. “Seguimos apostando al diálogo, queremos que el Estado Mexicano haga valer el Estado de Derecho”, dijo.
Ante ello las familias desplazadas pidieron a los gobiernos federal y estatal reanudar las mesas lo antes posible, de lo contrario, advirtieron, volverán a levantar la voz, manifestándose y retomando la lucha social, porque es “su única arma” y ya que están cansados de que pospongan el retorno. También exigieron que se convoque a los participantes a que “cumplan su palabra y los acuerdos”.
En dicha manifestación participaron mujeres, hombres niños, personas de la tercera edad y colectivos que acompañan a las familias desplazadas que se encuentran en la Ciudad de México.
“Me siento triste, decepcionada, duele mucho. Todos estaban felices por regresar este 16 de mayo a la comunidad. Las compañeras ya se encontraban empacando sus cosas para regresar a Tierra Blanca. A mí me duele ver a las señoras grandes, quieren regresar a la comunidad, están acostumbradas a la comida de la nación triqui”, lamentó en entrevista con EL UNIVERSAL, Eloisa Martínez, una joven triqui que participado en las mesas de diálogo para el retorno.