El cuerpo del bebé de tres meses hallado dentro del penal de San Miguel, en Puebla, fue trasladado a la Ciudad de México la noche del sábado para ser sepultado nuevamente, informó la Fiscalía de la Ciudad de México en un comunicado.
“Ayer por la noche, el cortejo fúnebre viajó de la ciudad de Puebla a la capital del país, para sepultar los restos del recién nacido”, se lee.
La Fiscalía aseguró que brinda acompañamiento jurídico, económico, psicológico y social a los padres del menor de edad y que, tras la denuncia por exhumación del cadáver, la investigación en curso se está ampliando.
“La tarde de ayer, una célula multidisciplinaria de la Coordinación General de Investigación de Delitos de Género y Atención a Víctimas, integrada por trabajadora social, psicóloga clínica y asesor jurídico, junto con personal de la Coordinación General de Investigación de Delitos de Alto Impacto, se trasladó al estado de Puebla“, indicaron.
“En la entidad, la célula del Centro de Apoyo Sociojurídico a Víctimas de Delito Violento (ADEVI) estableció contacto con la madre y el padre del menor de edad fallecido, para ofrecerles apoyo en el traslado del cuerpo a la Ciudad de México, así como en la gestión de la gratuidad en los servicios funerarios”, se lee.
Personal ministerial, peritos y detectives de la Policía de Investigación realizaron este sábado una inspección en el cementerio de Iztapalapa, así como entrevistas con personal del lugar.
El caso ha sacudido a México desde la semana pasada, cuando la asociación civil Reinserta denunció el hallazgo del bebé en el penal. Según explicó la ONG, un interno que trabajaba en los contenedores de material de plástico reciclable, conocido como PET, encontró el cuerpo del bebé cubierto con cal y dentro de una bolsa.
El hecho también ha levantado polémica porque la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se negó a investigar el caso, mientras que el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, advirtió a periodistas y activistas de que “tengan cuidado” al indagar la historia.
El fiscal de Puebla no aclaró aún cuáles fueron las motivaciones detrás del crimen aunque ahondó en que la autopsia arrojó que el bebé “conservaba todos sus órganos en su lugar y que presentaba una herida quirúrgica de 7 centímetros con sus puntos de sutura originales”.
“Nuestra investigación se encuentra en la fase final, por lo que en breve determinaremos las responsabilidades que en materia penal puedan atribuirse a quienes transportaron el cuerpo del menor en territorio del estado de Puebla“, prometió