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“Ni el gobierno federal ni los gobiernos estatales pueden mandar sus felicitaciones por el Días de las Madres sin reconocer la deuda que tienen con las madres buscadoras”
En este 10 de mayo, la Comisión Iberoamericana de Derechos Humanos para el Desarrollo de las Américas (CIDHPDA), en voz de su Comisionado Presidente para América Latina y el Caribe, Víctor Hugo Gutiérrez Yáñez, manifiesta su solidaridad con las madres buscadoras que no pueden disfrutar de este día de celebración por la ausencia de sus hijos e hijas.
En su mayoría, los grupos de búsqueda están conformados por mujeres: madres, hermanas, nietas e hijas, que se han visto obligadas a actuar ante la ausencia del Estado. Cada una de ellas tiene una historia admirable, pues además de financiar la búsqueda con sus propios recursos, se han valido de las estrategias más arriesgadas para buscar pistas que las lleven hacia el paradero de sus familiares.
Lamentablemente, las madres buscadoras no cuentan con la protección necesaria, por lo que han sido blancos de intimidaciones y amenazas por parte del crimen organizado e incluso por algunas autoridades, que, además, se han mostrado insensibles e ineficientes al momento de recibir sus denuncias. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), en 2022 cinco madres buscadoras fueron asesinadas. A ellas se suma el reciente asesinato de Teresa Magueyal, quien fue ultimada a balazos el pasado 2 de mayo en Celaya, Guanajuato.
Ni el gobierno federal ni los gobiernos estatales pueden mandar sus felicitaciones por el Días de las Madres sin reconocer la deuda que tienen con las madres buscadoras. Hay que recordar que existen más de 100 000 desaparecidos en México registrados desde 1964 hasta 2022 de acuerdo con los datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No localizada.
Por esta razón, en la CIDHPDA insistimos en el exhorto que le hacemos al Gobierno Mexicano y al poder legislativo para que se desarrolle un mecanismo de protección en favor de las madres buscadoras, y de todos los familiares en general, que arriesgan su integridad para localizar a sus seres queridos. Así mismo, es urgente que las autoridades correspondientes, tanto en las fiscalías como en los ministerios públicos, cumplan con su trabajo para llevar a cabo las investigaciones y ejecutar un castigo ejemplar para los victimarios. También es necesario crear estrategias eficientes para prevenir el delito de desaparición forzada.
En este 10 de mayo, muchas madres que buscan a sus hijas e hijos convocaron a marchas en varios estados del país para exigir verdad, justicia y recordar a las mujeres que han perdido la vida en la lucha por encontrar a sus desaparecidos. La CIDHPDA les extiende una mano solidaria y hace un llamado a los gobiernos estatales para que se garantice su seguridad y el respeto a su derecho a la libertad de expresión y su derecho a manifestarse libremente.
