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CIUDAD DE MÉXICO.- En comisiones del Senado, con la fórmula de mayoría simple, Morena y sus aliados sortearon sin mayor problema las resistencias de la oposición para aprobar la minuta que amplía la permanencia del Ejército en tareas de seguridad pública.
Es probable que Morena no encuentre las cosas tan fáciles este miércoles, cuando la reforma impulsada por el PRI sea votada en el Pleno, donde se necesitará el voto de las dos terceras partes de los senadores presentes.
“No debemos actuar con egoísmo ni con siglas partidistas”, alegó el morenista Félix Salgado Macedonio, reacio a que la discusión se prolongara.
Por el PRI —que impulsó la iniciativa en San Lázaro—, la senadora Claudia Ruiz Massieu votó en contra y Sylvana Beltrones se abstuvo.
Incisiva, Ruiz Massieu advirtió que la reforma terminará por “convertir a la Guardia Nacional en un cuerpo militar”, amén de que “hay una enorme terquedad para justificar una estratega fallida de seguridad pública que no ha dado resultados en tres años. Se trata de seguir una consigna”.
Beltrones propuso en vano que se convocara a los gobernadores para que dieran su punto de vista en torno a la estrategia de seguridad pública.
El coordinador de Movimiento Ciudadano (MC), Clemente Castañeda, coincidió en el diagnóstico.
“Si hoy las Fuerzas Armadas siguen siendo importantes para las tareas de seguridad pública, es por la propia responsabilidad de este gobierno, que ha abandonado a su suerte a las Policías locales, y mientras no haya ese reconocimiento del fracaso, no habrá estrategia de seguridad eficiente”.
El fundador del grupo plural, Germán Martínez, recordó que desde 1996, con Ernesto Zedillo, los militares han ido ganando terreno.
“Un civil debe estar por encima de un militar. Estamos instalando la mentira de que el poder civil manda sobre el militar”, protestó.
El senador cuestionó al titular de la Sedena, Crescencio Sandoval, por el discurso que pronunció el 13 de septiembre en la conmemoración de los Niños Héroes, con el que fustigó a los críticos de las Fuerzas Armadas y deslizó una amenaza.
“No, señor Crescencio Sandoval. No, general, no le admito ese discurso. Como representante de la nación, mis comentarios contra los malos miembros de las Fuerzas Armadas, no son comentarios tendenciosos. Son libertad de expresión, señor general”.
El morenista Eduardo Ramírez reconoció que es una cuestión “muy delicada” que en el Ejército se expresen posiciones políticas.
Por el PAN, Damián Zepeda resaltó el hecho de que, de la noche a la mañana, se ha desvanecido “”el ataque brutal” contra el diputado y líder nacional del PRI, Alejandro Moreno, dejando al descubierto que se usó políticamente la justicia y se llegó a un acuerdo político entre el gobierno y el PRI para impulsar la reforma.
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