La defensa del excandidato presidencial, Ricardo Anaya Cortés, se presentó este lunes en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México para la audiencia inicial en la que se busca imputarlo por un presunto acto de corrupción. Sin embargo, Anaya Cortés no acudió al recinto.
La Fiscalía General de la República (FGR) acusa al excandidato presidencial por presuntamente recibir un soborno de casi 7 millones de pesos a cambio de votar a favor de la reforma energética que se propuso durante el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto.
Al lugar acudió Eduardo Aguilar, abogado de Ricardo Anaya, acompañado de otras dos personas.
La audiencia inicial estaba prevista para el lunes 31 de enero, pero el juez a cargo del caso dio positivo a Covid-19, por lo que se pospuso hasta hoy. Es la cuarta vez que se busca llevar a cabo esta audiencia.
Anaya debe presentarse este lunes ante un juez de control para conocer la imputación que tiene en su contra la FGR por los delitos de cohecho, lavado de dinero y asociación delictuosa, todos ellos relacionados con el caso Odebrecht.
Esa acusación forma parte de los señalamientos que realizó el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, quien actualmente está bajo prisión preventiva justificada en el Reclusorio Norte ya que enfrenta el juicio por este mismo caso.
Desde el año pasado, Ricardo Anaya ha afirmado que esta acusación en su contra forma parte de una persecución política que ordenó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tras realizar un “pacto perverso” con Emilio Lozoya a fin de afectarlo políticamente.
En un video que publicó en septiembre, Anaya acusó que López Obrador, permitió a Lozoya quedarse con los sobornos otorgados por Odebrecht a cambio de que este inculpara a sus adversarios políticos.
Pese a las inconsistencias en el caso, el excandidato presidencial afirmó que la Fiscalía General de la República ha optado por perjudicar a los adversarios del presidente López Obrador.