El plan presentado por el presidente estadounidense, Joe Biden, para un cese al fuego en la Franja de Gaza y la liberación de los rehenes es “parcial”, afirmó este lunes un portavoz del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Biden reveló el viernes una hoja de ruta que describió como un plan israelí de tres fases para poner fin al conflicto, liberar a todos los rehenes y reconstruir la devastada Franja de Gaza, sin que Hamás, que gobierna este territorio palestino desde 2007, siga en el poder.
“El borrador que presentó el presidente Biden es parcial”, declaró el portavoz del primer ministro israelí, David Mencer. Agregó que Netanyahu indicó que la guerra se detendrá “con el objetivo de conseguir el retorno de los rehenes” y que después continuarán las conversaciones sobre cómo lograr el objetivo de eliminar a Hamás.
“Las afirmaciones de que acordamos un alto el fuego sin que se cumplan nuestras condiciones son incorrectas”, afirmó Netanyahu en otro comunicado emitido por su oficina.
Catar, Estados Unidos y Egipto, mediadores en la guerra, instaron el sábado a Hamás e Israel a “ultimar el acuerdo que incorpora los principios esbozados por el presidente Joe Biden”. El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, dijo que era responsabilidad de Hamás aceptarlo, según el Departamento de Estado.
Los bombardeos y los combates no dan tregua en Gaza, donde la mayoría de sus 2,4 millones de habitantes se han visto desplazados y las organizaciones humanitarias advierten del riesgo de hambruna.
Intensos Combates
La guerra estalló el 7 de octubre, cuando comandos de Hamás mataron a 1,189 personas, en su mayoría civiles, en el sur de Israel, según un balance de AFP basado en datos oficiales israelíes. Los milicianos también secuestraron a 252 personas. Israel afirma que 121 siguen cautivos en Gaza, de los cuales 37 habrían muerto.
En respuesta, Israel prometió “aniquilar” a Hamás y lanzó una ofensiva aérea y terrestre que ha dejado hasta el momento 36,479 muertos en Gaza, según el Ministerio de Salud del gobierno de Hamás. Al menos 19 personas murieron en bombardeos durante la madrugada en el asediado territorio, según los hospitales.
El ejército israelí afirmó el lunes que sus fuerzas habían golpeado a “más de 50 objetivos en Gaza” en los últimos días.
“Hemos hecho grandes esfuerzos para traerlos [a los rehenes] de vuelta, pero durante este esfuerzo hemos tenido presentes los objetivos de la guerra”, en referencia a la eliminación de Hamás, declaró Netanyahu en un video.
Según la ONU, más de 137,000 edificios han sido destruidos o dañados desde el inicio del conflicto, equivalentes al 55% de las estructuras de Gaza.
Los combates se centran de momento en Rafah, la ciudad del extremo sur del territorio que, según el ejército israelí, alberga los “últimos batallones” de Hamás, catalogado como organización “terrorista” por Estados Unidos, Israel y la Unión Europea. El ejército israelí lanzó una ofensiva contra esta localidad fronteriza con Egipto el 7 de mayo, provocando la huida de cerca de un millón de palestinos, según la ONU.