CIUDAD DE MÉXICO
La pareja de mexicanos Cielo Isamar Mojica Ruiz y Roberto Navarro Cervantes, que están varados en el aeropuerto de Turquía, piden ayuda a la embajada de México para volver al país, pues durante su viaje de vacaciones los asaltaron y no tienen dinero para regresar.
Cielo contó que el 10 de julio llegaron a Turquía, provenientes de Irlanda. Iban a pasar una semana ahí pasa seguir a Capadocia, “donde son los globos”, y de ahí visitarían Atenas, en Grecia, antes de regresar a México.
Pero el 15 de julio, como a las 12:30 horas, en el taskim en el centro de Estambul, cuatro hombres de color los asaltaron.
“Nos llegan por la espalda, avientan a mi esposo hacia el suelo, nos revientan una mariconera que contenía 6 mil 250 euros, un celular y otras cosas de valor. Nos las quitan y huyen hacia dos direcciones”, contó la señora a Proceso.
Los amedrentaron con un arma de fuego y a su esposo le hicieron heridas con navaja, mientras a ella la golpearon
Cuando llegaron al lugar que rentaban se limpiaron y marcaron a la embajada, donde les responden que están de asueto, puesto que era sábado en la madrugada y dejaron mensajes. El lunes, cuando les respondieron, les dicen que deben interponer una denuncia.
“Voy inmediatamente a ponerla, pero me toca un policía turístico que hablaba español, el cual me dice que para qué levanto la denuncia si no va a pasar nada, que quién me la pide, le dijo que la embajada y se comunican con ellos. Y ven que no me quieren poner la denuncia, me tratan mal por querer hacer lo correcto”, se quejó.
Cielo narró que nadie los ayudó y se quedaron en la calle hasta que un amable policía turco los dejó dormir en un lobby y les dio de comer. El martes fue al consulado y la titular la recibió a gritos, discriminándola por su apariencia, gritándole porque no puede hacer nada.
“Que me callara perra, en tres ocasiones me dijo; que no éramos nada para estar pidiendo ayuda. Saliendo del consulado me da un ataque de epilepsia y voy al hospital, me estabilizan y regreso al consulado y me dan mis maletas”, contó.
Un asistente en el consulado pide disculpas por el maltrato que recibieron y les da 50 dólares para llegar al aeropuerto, al que va a pedir dinero para comprar su boleto, pero un policía la maltrata ocasionándole otro ataque de epilepsia y empieza a sangran y sólo toma la medicación que ya le habían prescrito.
“Estoy toda la semana en el aeropuerto durmiendo en unas sillas, esperando alguna respuesta por parte del gobierno. Nos ayuda un señor del aeropuerto a darnos un lugar donde bañarnos y dormir en una alfombra.
“Me llama el consulado para decirme que no me va a ayudar, que es mi problema regresar a México. Hice todo lo que me pidieron para que me ayudaran, correos, llamadas, etcétera. Perdí a mi bebé, estoy sin comer. Sin un lugar, sólo una alfombra, humillados por el consulado, tratando de sobrevivir”, comentó.
Cielo dijo que querían unas vacaciones normales, pues la pareja se había casado el 9 de mayo pasado en Monterrey, Nuevo León, pero se convirtieron en un terror. “Sólo queremos regresar a México, solo eso y empezar de nuevo”, suplicó.