El jefe del Estado Mayor de Irán ordenó este lunes investigar el accidente de helicóptero en el que murieron el presidente Ebrahim Raisi y su ministro de Relaciones Exteriores. Mohammad Bagheri dispuso la formación de “un comité de alto rango” para determinar la causa del siniestro, según informó la agencia de noticias ISNA.
El país declaró cinco días de luto por la muerte de Raisi, un ultraconservador en el poder desde hacía tres años y considerado uno de los favoritos para suceder al ayatolá Ali Jamenei, líder supremo de Irán.
El líder supremo designó al primer vicepresidente, Mohammad Mokhber, como presidente interino, mientras se preparan elecciones en un plazo máximo de 50 días. Ali Bagheri, negociador del programa nuclear iraní, fue nombrado canciller interino, tras la muerte del ministro Hossein Amir Abdolahian.
Un periodo de incertidumbre
El martes comenzarán los funerales del presidente Raisi, cuya muerte a los 63 años abre un periodo de incertidumbre política en Irán, en medio de la guerra en la Franja de Gaza entre Israel y Hamás, un aliado de la República Islámica.
El gobierno iraní describió a Raisi como un “presidente trabajador e infatigable” que sacrificó su vida por la nación. La agencia oficial Irna destacó que “el gran espíritu del presidente popular y revolucionario de Irán se ha unido al reino supremo”.
El helicóptero Bell 212 en el que viajaba Raisi desapareció el domingo por la tarde mientras sobrevolaba una región montañosa de Irán bajo condiciones meteorológicas adversas, incluyendo lluvia y densa niebla.
Reacciones internacionales
Además del presidente y el ministro de Exteriores, el helicóptero llevaba al gobernador de la provincia de Azerbaiyán Oriental, el principal imán de la región, el jefe de seguridad del presidente y tres tripulantes. Los cuerpos de los pasajeros fueron recuperados este lunes y trasladados a Tabriz, según la Media Luna Roja.
La comunidad internacional siguió de cerca la situación, con mensajes de condolencias de líderes mundiales. El primer ministro indio, Narendra Modi, expresó su “profunda tristeza” por la muerte de Raisi. En Rusia, el presidente Vladimir Putin rindió homenaje a un “político notable” y “verdadero amigo de Rusia”, mientras que el presidente sirio, Bashar al Asad, proclamó su “solidaridad” con Teherán. El presidente chino, Xi Jinping, calificó la muerte de Raisi como una “gran pérdida para el pueblo iraní”.
