Tras la esperanzadora intervención que le otorgó 27 semanas adicionales de vida, Richard Slayman, quien recibió el primer trasplante de riñón de cerdo genéticamente modificado del mundo, ha fallecido, según informó el Hospital General de Massachusetts, encargado de la operación.
Slayman, residente de Weymouth, Massachusetts, fue dado de alta el mes pasado después de la exitosa cirugía. Su historia médica incluía diabetes tipo 2 e hipertensión, y anteriormente había recibido un riñón humano en 2018, el cual comenzó a fallar cinco años más tarde, llevándolo a depender de diálisis.
En un comunicado, la familia de Slayman expresó su profunda tristeza por su fallecimiento repentino, pero también destacó la inspiración que su historia brindó a millones de personas en todo el mundo que esperaban desesperadamente un trasplante.
El hospital no ha indicado que la muerte de Slayman esté relacionada con su reciente trasplante. Ofrecieron sus condolencias a la familia y seres queridos, recordando a Slayman como una persona extraordinaria cuya generosidad y amabilidad conmovieron a todos los que lo conocieron.
El trasplante de Slayman se llevó a cabo bajo una política de “uso compasivo”, permitiendo a pacientes en condiciones graves o potencialmente mortales acceder a terapias experimentales aún no aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos. El riñón de cerdo utilizado fue proporcionado por la empresa de biotecnología eGenesis de Massachusetts, que lo modificó genéticamente para eliminar genes nocivos y agregar otros humanos.