La agencia de inteligencia de Corea del Sur informó el viernes que Pyongyang planea ataques “terroristas” contra sus funcionarios y ciudadanos en el extranjero, un día después de que la Cancillería surcoreana elevara el nivel de alerta para las misiones diplomáticas en cinco países.
El Servicio Nacional de Inteligencia detectó indicios de que Corea del Norte está preparando ataques terroristas contra su diplomático personal y sus ciudadanos en varios países como China, el Sudeste de Asia y Oriente Medio.
Estos aviones parecen estar relacionados con una oleada de deserciones de norcoreanos de la élite que quedaron bloqueados en el extranjero durante la pandemia del covid-19. En Corea del Norte, la deserción es un crimen grave y se cree que se imponen duros castigos a quienes lo intentan, a sus familiares e incluso a personas tangencialmente relacionadas con la fuga.
Lee Man-jong, presidente de la Asociación Coreana de Estudios sobre Terrorismo, afirmó que “el fin de la pandemia permite a los agentes norcoreanos, antes confinados en su país, viajar al extranjero para realizar misiones”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur ha incrementado el nivel de alerta antiterrorista en cinco misiones diplomáticas: las embajadas en Camboya, Laos y Vietnam, y los consulados de Vladivostok en Rusia y de Shenyang en China. En estos cinco lugares, tanto Seúl como Pyongyang tienen embajadas o consulados.
Corea del Norte mantiene relaciones diplomáticas con más de 150 países, según el Ministerio de Unificación de Seúl, pero el número de misiones operativas exteriores se ha reducido desde 1990 por motivos financieros. El año pasado, Pyongyang cerró varias misiones diplomáticas en lugares como Angola, Uganda, España o Hong Kong, una decisión que Seúl atribuyó a una mala situación económica.
El año pasado, llegaron a Corea del Sur 196 desertores norcoreanos, de los cuales unos diez pertenecen a la élite, como diplomáticos y posiblemente sus hijos.
