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SOUTH PADRE ISLAND, TEXAS.- SpaceX canceló ayer el primer intento de lanzamiento de su cohete gigante después de que surgió un problema durante la carga de combustible.
La compañía de Elon Musk planeaba despegar la nave Starship de casi 122 metros desde el extremo sur de Texas, cerca de la frontera con México.
El vuelo de prueba se canceló con poco más de ocho minutos restantes en la cuenta regresiva debido a una válvula atascada necesaria para presurizar el propulsor de la primera etapa.
Los controladores de lanzamiento no pudieron reparar la válvula congelada a tiempo.
No habrá otro intento hasta el jueves.
“Aprendí mucho hoy”, tuiteó Musk después de que se pospusiera el vuelo.
La NASA escogió la nave Starship para llevar astronautas a la Luna a finales de 2025 -en una misión bautizada Artemis III- por primera vez desde que el programa Apolo finalizó en 1972. Más adelante, se planea usar el cohete para misiones a Marte.
Con su altura, Starship pertenece a la categoría de lanzadores superpesados, capaces de transportar más de 100 toneladas de carga a la órbita.
En la víspera del intento de lanzamiento, automovilistas, personas en casas rodantes e incluso en bicicletas y caballos abarrotaron el único camino que conducía a la plataforma de lanzamiento.
Ernesto y Maria Carreon condujeron dos horas desde Mission, Texas, con sus dos hijas, de 5 y 7 años, para observar el despegue.
“Me puse triste. Se pusieron tristes (cuando se canceló el lanzamiento)”, dijo Maria Carreon, quien no podrá volver para el próximo intento.
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