San Francisco, E.U.
Los Warriors de Golden State se encuentran en un territorio conocido después de que no pudieron finiquitar la serie de visita. Esperan tener también un resultado familiar cuando vuelvan a casa.
Por tercera serie consecutiva, los Warriors perdieron como visitantes en una primera oportunidad de avanzar a la siguiente fase. Pero podrían alcanzar las Finales de la NBA por sexta ocasión en los últimos ocho años si resuelven la serie ante los Mavericks de Dallas este jueves, en el quinto juego de la final de la Conferencia Oeste, ahora como locales.
Los Warriors lograron recuperarse tras esos deslices en las primeras dos rondas ante Denver y Memphis y esperan repetir la hazaña tras caer por 119-109 ante Dallas el martes.
“Aprendimos una buena lección”, reconoció Stephen Curry. “Los felicito por que encestaron muchos tiros. Tuvimos algunos quiebres de nuestro lado, se los dejamos fácil y nos hicieron pagar”.
SIGUEN CON VIDA
Los Mavericks han evitado quedar eliminados tres veces esta temporada. Ganaron el sexto partido y el séptimo ante Phoenix en la segunda ronda y de nuevo sobrevivieron ante los Warriors en el cuarto duelo.
Ninguno de estos encuentros ha sido apretado. Dallas superó a sus rivales por 70 puntos en esos tres triunfos.
Luka Doncic ha liderado el camino con 98 unidades y 35 rebotes en las tres victorias, pero dijo que la clave ha sido la agresividad de la ofensiva y el compromiso de la defensiva.
“Tenemos que creer”, aseguró Doncic. “Pienso que nuestra defensiva fue mucho mejor ahora y atacamos en la pintura. Esas dos cosas son clave y eso es lo que tenemos que llevar a San Francisco”.
MOVIMIENTO JOVEN
Los Warriors se recuperaron en el cuarto periodo del encuentro gracias a una joven alineación que contó con Jordan Poole, de 22 años, y los novatos de 19 años Jonathan Kuminga y Moses Moody.
El trío, junto a Nemanja Bjelica y Damion Lee, recortó la desventaja de 29 a ocho tantos en los primeros 8:38 minutos del cuarto periodo antes de que Curry y el resto de los titulares volvieran.
TAREA COMPLICADA
Ningún equipo se ha recuperado de una desventaja de 3-0 para ganar una serie al mejor de siete en la historia de la NBA e incluso volver a Dallas para el sexto encuentro sería extraño.
De las 146 veces anteriores que un equipo se ha ido arriba 3-0, terminó barriendo la serie en 90, y ganando tras cinco duelos en 42.
Si ganan el jueves, los Mavs se convertirían en el 12mo equipo que obliga a disputar un sexto partido. Sólo tres equipos han alcanzado ese séptimo compromiso antes de perder.
