#Chihuahua •
Chihuahua y la Gobernadora tienen una debilidad. Una muy inconveniente debilidad: endeudarse a largo plazo bajo condiciones que implican un alto costo financiero. Contrario a aquella promesa que nos hacía cual buena administradora de poner orden, la deuda aumenta y lo pero es que no sabemos ni qué debemos. Para ponerlo en perspectiva, para 2022, la deuda dividida entre la población equivale a que cada chihuahuense debíamos el año pasado, $14,894 pesos.
Para este 2023, esa deuda ha aumentado a $15,696 para cada una y cada uno de nosotros, eso sin contar el crédito de $3 mil millones de pesos que se pretende pagar a 20 años ¿Sabe Usted en qué se ha gastado o por qué estamos en ese nivel de deuda? Quisiera poder decirle que es por grandes beneficios que han valido la pena, pero lamento no poder hacerlo.
El caso de Chihuahua ha levantado alertas no solo en un segmento de la población quienes vemos con asombro cómo crece la deuda, sino incluso para la Secretaría de Hacienda y Crédito Público que, a través del Sistema de Alertas ubicaba ya desde el cierre del primer trimestre del año a Chihuahua, en semáforo amarillo, solo junto a Coahuila, mientras el resto de los estados se ubican en verde, lo que traduce en un nivel de deuda sostenible.
Más allá de números, en términos reales, le podemos decir que las finanzas públicas debilitan la capacidad del estado de atender contingencias, e incluso de pensar en brindar algún beneficio para la población, y comprometen cada vez más los recursos que el gobierno debería utilizar para el bienestar social, haciendo de Chihuahua un lugar en el que, ya no digamos estar bien, sino solo estar, es muy caro.
No podemos dejar de decir que Chihuahua viene arrastrando una situación de endeudamiento que lamentablemente, pero tampoco ocultaremos que esto no está siendo atendida por la Gobernadora… por el contrario, está aumentando recurriendo a los mismos mecanismos de sus antecesores repitiendo los mismos errores.
A pesar de que el desorden que hay en la casa se trata de esconder de la población, buscando pintar una realidad en la que todo es miel sobre hojuelas, la verdad es que nuestros recursos están comprometidos de tal manera que nuestra mandataria se ha dedicado a cruzarse de brazos ante las necesidades más apremiantes mientras hay una cartera que sin duda está engordando de manera muy vil…y no es la de las y los chihuahuenses.
Por ahí suena el nombre de un calderonista que se dice, ha tomado las riendas de las finanzas de Chihuahua, aconsejando a la actual administración, adquirir más deuda y encima, cobrar por esos malos consejos cantidades millonarias.
Le aconsejo a mis lectores que, la próxima vez que escuchemos que en Chihuahua financieramente es una maravilla, nos pongamos a observar de manera muy crítica y sobre todo, informada, la información pública: si ya de por sí, los créditos proyectados para este 2023 ya representaban más de la mitad de lo que Javier Corral había pedido en 5 años: una desproporción muy acelerada.
He aquí una reflexión del padre de la macroeconomía, John Keynes, para que como ciudadanía estemos atentos: “Si te debo una libra, el problema es mío. Si te debo un millón, el problema es tuyo.”